Una noche donde todo era tranquilo.
Donde las luciérnagas encendían la noche.
Un ambiente de relajación y paz reinaba.
Tuve la rara impresión de ver pasar lo que todos llamarian un ángel.
Mis ojos se deleitaron al verte pasar.
Le pregunté a mi corazón si eras real
Pero solo escuché su voz diciéndome
"Ve y averigualo".
De inmediato me levanté pero mis tontas piernas fallaron.
Cai bruscamente al verde y húmedo césped.
Con miedo a perderte de vista salí en tu búsqueda.
A lejos te ví radiante y benevolente.
Las nobles estrellas te seguían lentamente.
Paso a paso camine anhelando tu dulce aroma.
Corrientes de sensaciones extrañas recorrían mi cuerpo.
Moviéndose en todas las direcciones
Cómos las raíces de un árbol.
Cuando logré llegar a ti y te tome de las manos.
Sentí la sencillez y la calidez de un verano en Roma.
Logras que me pierda en tu mirada
Tartamudear es lo primero que sale de mi.
Derepente sueltas una pequeña sonrisa
Y por un momento se ilumino mi mundo.
Cuando logré volver a la realidad
Me observabas con esos ojos color cafés.
Solo llegue a escuchar que me decias "eres divertido"
Te diste la vuelta y te fuiste sin despedirte nuevamente.
Comments